La creatividad de Edith se inspira sobre todo en lo que ella cree que es el hilo invisible que une al hombre con los dioses.
Nos habla del intento del hombre por establecer un diálogo con ellos; Piensa que el hombre recurre a los dioses porque se siente huérfano y sólo. Los dioses siempre suponen, cuando menos un bálsamo a esa terrible soledad del hombre ante lo desconocido, sentimiento que se mantiene intacto desde los albores de su existencia.Amparo del Pino